martes, 4 de enero de 2011

De mi segundo poemario: "odilón" próximo a publicarse



odilón  desde la perspectiva no siempre exacta de su portador


EN ESTOS MESES de encierro
he intentado muchas veces razonar la última palabra del ciego...
Ernesto Sábato


ayer odilón     caro amigo
bajé  por la escalera a tientas
para no toparme con mi sombra
dejé atrás mi piel escamada
y corrí bajo los cascos de un equino

- vieras que ni siquiera tuvo
la delicadeza de mirarme  a los ojos-

dirigí una mirada
a los huecos de mi rostro
donde  inventamos un lenguaje mutuo
donde  dibujamos símbolos                             
que sólo nosotros comprendimos
donde construimos una fonética distinta
a la de nuestros abuelos
e hicimos de nuestra imagen
una estampa en negativo

ahí donde la luz nos penetró al mismo tiempo
y nos llagó la carne en partes iguales
nos rasgó las tripas y testículos
y el rostro todo de igual manera
tendí mi cuerpo en espera de ese ansiado sueño
de la imagen única y verdadera

recorrí  los caminos     odilón
donde cuentas
que las personas suelen mirarse a los ojos
por días
por meses
y  por  años
donde la piel del rostro se transforma
en un ser unánime
y  las miradas se confunden juntas
en un punto imaginario

recorrí los caminos trazados hace lustros
borrados por el paso de los días
pero muy a pesar de mis esfuerzos    
aquellos rostros no me ofrecen
más que horizontes vacíos

rara ítaca me presentas con tus relatos amigo
el  lugar donde nuestro padre
se niega tres veces a sí mismo
el lugar donde la luz del  astro rey nos encandila
y transforma a tristán e isolda
en puercos travestidos

hijos de las sombras nos llamaban
hijos del encierro   
de alas desplumadas y cera derretida
de  carne trémula y palabras escondidas
que se meten por debajo de las uñas

pero aún así  somos inmortales
una imagen impresa
que reniega de su alegoría
que besa
copula
fornica
y expulsa la sangre
que  mana de la noche
habitantes de la frontera más lejana
del país sin bordes
y  la imagen perceptible

llegamos tarde
y tus palabras terminaron
por quemar la tierra que pisábamos
de nuestros ojos brotó sangre y aguamala
y nuestras cabezas trazadas al azar
terminaron  por deformarse tanto a la usanza de viejos trofeos
y de nuestro cuerpo entumecido
emergió la última mirada en espera de respuesta

sin embargo     tú no provocaste que me ahogara en un vaso de agua
tú  me  ahogaste  en la catarata de un ojo
y no sabes o no quieres darte cuenta
que es imposible cambiar lo que nos rodea
con un simple pestañeo

vi  mis adentros      y me vi las entrañas
y las tripas colgando     rojas como en tendedero
y mis carnes llagadas por dentro
y mi aliento cortado
y mis ojos cegados desde dentro
susurrándome al oído

cuántas veces en la vida     hermano

te ha sangrado la retina


  
 principio de la visión  estenopeica  
(remembranzas de odilón)


                                                                         Soy un producto
                                                                           soy un símbolo
                                                      de juegos interminables(…)
                                                                                         Crass


es hora de que mi reflejo se confunda con mi aliento
mi cuerpo desde el culo hasta la lengua
es proporcional a la imagen que refleja
y  me es permitido hablar
de lo que no se alcanza a ver
de lo que no se alcanza a distinguir

los ojos no son necesarios
para ver los sueños
si no para ver sólo  lo que puede ser concebido
y admirar lo que está construido de fondo
de esa manera  lo que está a nuestro alcance
toma forma y se describe
para volverse una representación inexacta
de una realidad cambiante

hipotéticamente una sombra no tiene reflejos
una sombra se basta
con su sombra misma
y la historia más contada
sobre el fondo y la forma
se mutila
con la cara cortada
por un haz de luz en forma de navaja
mientras mi memoria
observa cuando cuelga en llamas
en el cuarto más oscuro
el retrato de mi padre
al lado de su madre loca  y decrépita
con espinas en la frente

vuelvo a verlo en el mismo espejo   
atestado con llamas y recuerdos
sin que en ese espejo se reconozca mi imagen
se rompió el espejo mágico en el que volvía
a verme idéntico
y en cada fragmento fatídico veo sólo un
pedazo de mí
un pedazo de él y de mí
mientras  la imagen figurada se convierte
en un rostro  segmentado
que cubre sus ojos con agujas
mientras la imagen figurada de mi padre
arde entera en un cuarto oscuro



ilusión de muller-lyer

abriré los ojos de una vez por todas
para por fin quedarme ciego
y sentir a solas con mis manos
todo el sudor frío de un hombre sin aliento
separaré los cabellos de mi rostro sólo con
mis manos
y desde la frágil utopía de la inocencia
mis nervios y tendones
se fundirán
como  el molde de una estatua de cera perdida

con  mis pensamientos
desde lo profundo de la noche
atascando con delirios la palabra de un alma empeñada
mirare desilusionado
que todo es tal y como lo recuerdo
que nada ha cambiado
que todo es exactamente
como antes de cerrar los párpados
que la luz y las sombras
ejecutan su danza monocorde
a la hora primera de la noche
y las lágrimas corren hacía el cielo

he amado en más de una ocasión
a una ciega te digo
y sus lágrimas corren hacia el lado opuesto de su sonrisa
he comido los desechos de la vista ennegrecida
y el sabor de lo perdido regresa intacto con el olor de los ojos negros

aticemos con el viento de la noche el calor de la mirada que reinventa
fundamos imagen y sombra con el estertor de un hombre en llamas
y llamemos a la muerte por su nombre
llamemos a los demonios por su nombre
y arranquemos nuestra carne con un solo movimiento

que el sabor de la derrota invada comisuras y orificios
y que el amor de una ciega se convierta en la última esperanza de un hombre con los ojos   
                                                                                                                               /vendados
que a tientas busca el camino hacia la tierra de nadie
donde dos líneas paralelas asemejan un horizonte que se pierde en una sola línea recta



  
 escucha hombre el curioso estruendo de un cristal
o de un ojo de vidrio que se estrella

                                                                     En Yankilandia el cowboy Fritz
                                                                                    mató a la obscuridad

                                                                                           Carlos Oquendo

1

lucía tiene un ojo en lugar de sexo
y por ese hueco descubre cuando digo mentiras
lucía tiene un ojo en lugar de sexo y con ese ojo
me deleita cuando nos quedamos a oscuras
lucía tiene un ojo en lugar de sexo
y con ese ojo los dos miramos
un universo que conspira

2
a mitad de la imagen entre párpado y pestaña
cuchillo
castígame lucía y trágame entero
y déjame ciego

3
escucha lucía el curioso estruendo de un cristal
o de un ojo de vidrio que se estrella
lo hemos visto destruirse a sí mismo
por no gustarle lo que mira
y al verlo ciego creemos en la ceguera
al verlo ciego creemos en la ceguera
al verlo ciego todos nos sabemos ciegos
donde han quedado atrás los días en que los primitivos
veían sólo con sus manos

4
hay un escenario que se cierra tras nosotros
un oscuro telón que nos oculta después de sabernos observados
por las miradas morbosas de los vivos

5
lucía tiene un ojo en lugar de sexo
lucía tiene un ojo que juntos dejamos ciego

6
un hombre  inventa sus propias realidades
un hombre miente por sus propias realidades
un hombre muere por sus realidades inventadas
y lucía
ha muerto por su imagen inventada
por el recuerdo de un hombre dormido

7
lucía
tu sexo es un ojo enorme
lucía
la noche es una visión etílica
lucía
cómo saber cuando hemos quedado ciegos
lucía
cómo saber cuando hemos quedado ciegos


  

 Photobucket